¿Es el mar nuestro vertedero?

El ser humano siempre ha pensado que podía usar la naturaleza para su beneficio, y uno de esos provechos es utilizar el medio ambiente como vertedero. Algunas de las zonas más afectadas son los océanos y los mares, ya que por un medio u otro el plástico que nosotros tiramos acaba allí.

El 80% de los residuos marinos proviene de la tierra, mientras que el 20% restante, de la actividad marítima. Parece ser que no nos concienciamos del efecto que causan nuestras acciones, y debido a ello, son otros seres vivos los que pagan nuestra irresponsabilidad.

Actualmente, se localizan varias ''sopas'' o ''islas'' de plásticos en las zonas subtropicales: una en el Índico, dos en el Atlántico y dos en el Pacífico.

CÓMO AFECTA A LA VIDA MARINA

No han sido pocas las especies marinas afectadas por este tipo de desechos. Desde colillas, pasando por bolsas mayormente de plástico, botellas, latas, hasta tapones y petróleo. El mar se ha convertido en nuestro vertedero personal, ya sea accidental o deliberadamente. Y con ello no solo nos afectamos a nosotros mismos en un futuro, sino a las especies que viven en él actualmente.

La cantidad de oxígeno creada por la vida marina también se ve afectada. Cuando varias formas de residuos orgánicos entran en el océano, como fósforo y nitrógeno, va a existir menos oxígeno en un lugar determinado, el ecosistema simplemente no será capaz de manejar eficazmente el volumen de la materia orgánica.

Algunas formas de cómo pueden afectar estos residuos a las especies puede ser:

• Confusión del alimento con los residuos, como por ejemplo cuando las tortugas marinas se equivocan y en vez de comerse una medusa, se traga una bolsa de plástico, lo que puede causar indigestión o asfixia.

• Debido a que el plástico flotante no adquiere una forma determinada y se empieza a deteriorar, se forman huecos en los que muchos animales pueden quedar atrapados. Muchos de estos animales viven toda su vida atrapados y sus cuerpos crecen conforme el poco espacio que tienen libre.

• A diferencia del caso anterior, algunas especies quedan completamente atrapadas, sin capacidad de crecer o simplemente desplazarse. Esto es causado en su mayoría por las redes ya inservibles desechadas por los pescadores.

• En consecuencia de las ''islas'' o ''sopas'' antes mencionadas, los ecosistemas quedan terriblemente reducidos, lo que hace que especies que antes no convivían juntas comiencen a hacerlo. 

Aunque los plásticos grandes pueden causar muchos problemas, los que más nos afectan son los microplásticos que son pequeñas partículas dispersas en el agua. Estas partículas son ingeridas por los peces que posteriormente nosotros vamos a comer.

Con las olas y el sol, el plástico se erosiona y deshace transformándose en estos pequeños trozos de plástico llamados microplásticos. Posteriormente, peces pequeños se comen los plásticos y a través de la cadena alimenticia, el plástico llega a nuestra mesa.